Por Jessica Ramos V. / Terra.cl / Mayo 2008

Toli Hernández durante dos años fue presidenta del Movimiento Unificado de Minorías Sexuales, más conocido como MUMS. Es lesbiana y hoy ha asumido el cargo de coordinadora ejecutiva de la organización, que ya lleva más de 10 años de existencia en nuestro país.

“Ser lesbiana aún tiene una connotación perversa y patológica”, aclara Toli, dejando en claro que los cambios que se han dado en torno al tema de una condición sexual, en nuestro país, por el momento son tan sólo cosméticos. Vale decir sin un verdadero trasfondo.

Por su parte, Freya Schneider, coordinadora de comunicaciones del movimiento y también lesbiana declarada, asume que “si andas por la calle, no puedes andar de la mano porque puede pasar cualquier cosa. O te miran o te echan de los lugares, no puedes relajarte”, aclara.

¿Cómo nace el MUMS?
– Toli: Nace en 1991 convocando a un montón personas que decidieron luchar en contra de la discriminación por las evidentes desigualdades sociales con respecto a las personas que no son heterosexuales.

Entiendo reúne a varias minorías sexuales…
– Toli: De hecho esa es una discusión que estamos teniendo ahora. Nosotros no somos minoría, porque al decirlo, eso sería validar que existe una mayoría dominante, en este caso la heterosexualidad. Nosotros entendemos que estas categorías son construcciones culturales, tanto la heterosexualidad como la homosexualidad, por lo tanto, nos vinculamos con un trabajo transversal, pero que está focalizado con estos grupos (…) ser lesbiana sigue teniendo una connotación perversa, patológica y no se valora la diversidad que fue propuesta por este gobierno.

¿Cómo trabajan en la organización?
– Toli: Nosotros tenemos que generar una situación de diagnóstico constante de la realidad (…) Hay que generar un espacio para que la gente vaya perdiendo ciertos temores. Las personas gays, lesbianas, y en especial transexuales todavía los siguen despidiendo del trabajo (…)Uno de los hitos fundamentales dentro de este recorrido fue la modificación del artículo 365, que penalizaba las relaciones sodomíticas consentidas entre dos personas adultas. Nosotros logramos la modificación de eso, ya no se penaliza. Ahora estamos trabajando para seguir cambiando puntos que son discriminatorios.

¿Cómo qué?
– Toli: En una colegio, por ejemplo, ves que las niñas en octavo año pueden pololear tranquilamente con alguien años mayor, no se cuestiona. Sin embargo, cuando eso sucede en el ámbito y en el contexto de una persona que no es heterosexual, la situación se explica así: ‘es que esto es un degeneramiento, es perverso’.

¿No sienten que Chile ha ido avanzando?
– Toli: Es que estamos hablando de modificaciones que no pasan solamente por la forma. Hay una visión de fondo que no ha sido cambiada. Siento que hay una amabilidad del sistema, el concepto más manoseado que existe es la tolerancia. Y creo que esas situaciones no están aportando en la transformación de fondo que se requiere. Como organización no estamos pidiendo integración a un sistema que es desigual. Además que esta amabilidad sistémica mucha gente lo toma así como que puedes andar con tu pareja, pero resulta que a las chicas las siguen sacando del cerro Santa Lucía, a los chicos los siguen golpeando, entonces no habla de un cambio real.

Lo ven como un cambio cosméstico…
– Toli: Claro… además que nosotros hemos abierto un nicho comercial, y éste termina también atontando o permite que las personas no hagan visibles la propia discriminación (…) también estamos en desacuerdo con lo que estipuló el tribunal constitucional sobre la píldora del día después. Nosotros pensamos que el machismo mata y la homofobia también.

¿Qué piensan del discurso de tolerancia que hay?
– Freya: Es como que mientras estén lejitos, todo ok.
– Toli: O sea, la discriminación existe en todo ámbito y en el mundo homosexual también va a existir discriminación por clase y categoría. Y esas situaciones me llevan a cómo la homosexualidad se ha ido desheterosexualizando.

¿Cómo así?
-Toli: Claro, porque mientras más heterosexual te veas, más incorporado e integrado al sistema vas a estar. Por eso una loca, un travesti o una lesbiana que sea masculina, va a ser discriminada por sus pares.

¿Es difícil asumir que se es lesbiana?
– Toli: Es que existe un sistema que es discriminador en que existen estigmas. En definitiva, el gobierno no se ha hecho cargo de estas situaciones.

¿Han sentido prejuicios al asumir su condición?
– Toli: Creo que la organización MUMS existe, porque hay muchas personas que viven en un contexto de discriminación al no poder expresarse libremente. Esto tiene que ser modificado, más allá de las experiencias personales (…) Ahora, por ejemplo, estamos en la sala de centro de apoyo y consejería que son servicios gratuitos y el público es generoso y eso habla de que sí hay conflictos que están siendo atendidos que surgen como necesidades.

¿Cuál es su postura frente al matrimomio homosexual?
Toli: No negamos que exista una necesidad de un grupo que quiere casarse, pero nuevamente hay que entrar en el contexto de la integración. Osea en dónde nos encapsulamos en el matrimonio que es una institución heterosexual, entonces no estamos generando un aporte, sino que sólo el fortalecimiento del sistema (…)

¿Qué opinan sobre tener hijos?
Toli: Creo que después del matrimonio debe venir la adopción (ríe) Esas situaciones se deben analizar en términos amplios, en cómo muchas mujeres por la discriminación terminan vertiéndose con ropaje heterosexual, terminan casándose, negándose, lo que conllevan a conformar una familia aparente, tener hijo… es un tema cultural que debe ser trabajado. De hecho se nos ha inculcado que las mujeres bisexuales no están llamadas a ser madres. Pero esa realidad existe y de hecho ha sido trabajada a través de las indicaciones que se hicieron que establece medidas en contra de la discriminación.

¿De qué forma?
Toli: Que no sea un impedimento tener hijos el hecho de ser lesbiana o de convivir con una pareja gay o que seas trans. Pero hay temas de fondo que son culturales. Hay lesbianas que han decidido tener hijos por distintas situaciones. Y existe una situación desigual de cómo ellas pueden ejercer la maternidad.

Freya, ¿qué opinas?
-Freya: En esto se instala eso que las mujeres sólo están para procrear, tengo una hija por opción, proyecto de una pareja de lesbianas.
-Toli: Si vas donde una familia heterosexual progresista y te conocen como lesbiana y presentas a tu pareja con la llevas 7 años, todos dicen qué bien, pero si va una lesbiana, que es picaflor, algo que tiene todo el derecho a hacer, como todo el mundo, no va a ser muy bien mirada.

¿Ven cambios?
– Toli: Ha sido todo súper lento, veo más amabilidad en el sistema, pero en término concretos han sido manifestaciones de buena crianza. El único hecho concreto de todo esto fue la modificación del artículo 365, pero hay otro artículo que regula la moral y buenas costumbres, pero ¡qué es eso!, y esa es la ley y uno podría cuestionarle inmediatamente.

En el ‘Señor la Querencia’ hay una lesbiana…
– Toli: Creo que esa es una prueba concreta que la homosexualidad, el lesbianismo ha existido siempre. No sé cómo será abordado en la televisión, pienso que podría ser ciertos aportes en cuanto a visibilidad, pero eso uno lo tiene que ir evaluando de cómo se va planteando. Porque la TV tiene mucho el cuento del morbo, o de poner algo por tener más rating. Por eso no sé si haya un trasfondo más político. De hecho, los medios de comunicación, pese que han cambiado el vocabulario, son peyorativos para mencionar estos casos.
– Freya: No es la primera que se aborda el tema del lesbianismo en la TV. Siento que efectivamente hay un poco de morbo y se pelea por eso del rating. Ahora, tampoco he visto esta nueva teleserie.

¿Por qué los medios son peyorativos?
– Toli: En lo del VIH los datos son confidenciales. Los periódicos muchas veces enuncian situaciones con nombres y títulos con personas que tienen VIH (…) recuerdo alguna vez una situación así dentro de estos programas faranduleros, cuando Raquel Argandoña hablaba y sacaba del clóset a Ignacio Gutiérrez. Eso habla de un sistema de televisión que no regula esas situaciones, por lo tanto todo este medio sigue siendo discriminatorio.

La Geisha chilena también lo hizo alguna vez…
-Toli: Claro, entonces en ese sentido en líneas programáticas y procesos que pudieran regular esto, no está dado. Genera este morbo que termina en que uno dice una cosa y el otro le responde (…) Es cosa de ver cuantos cómicos imitan a homosexuales y eso es estigma, porque las personas heterosexuales no sólo son de una manera. Existen distintos tipos de lesbianas, de gays, pero en la televisión ciertos tipos de gays son puestos en la televisión para ser ridiculizados.

¿Sienten que asumir ser gay es ser valiente?
– Toli: Creo que para hacer eso siempre va a haber un acto de valentía envuelto. Ahora, los medios de comunicación sólo se focalizan en la valentía y no en el tema de fondo.

¿Es posible vivir más tranquila en Chile?
– Freya: Hay una actitud más amable, pero es sólo eso. Sin transfondo. Porque si andas por la calle, no puedes andar de la mano porque puede pasar cualquier cosa. O te miran o te echan de los lugares, no puedes relajarte.
-Toli: Hay que tener en cuenta que las agresiones no son sólo físicas, sino que también hay aquellas simbólicas, como esta mirada insistente…