El fallo entregado en el día de hoy (martes 12 de Agosto) por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en el cual se acoge la demanda de la Jueza Karen Atala sobre la violación de sus derechos al ser privada de la tutela de sus hijas por su orientación sexual por los tribunales nacionales, pone al gobierno en la obligación de reformular sus políticas frente a la discriminación, especialmente la Ley que Establece Medidas contra la Discriminación, así lo entendemos desde el mundo de las organizaciones GLBT.

Este fallo era esperado por las organizaciones gays y lésbicas, ya que desde la mirada jurídica la sentencia contra Atala no tiene sustento, por lo mismo se espera que el gobierno tome medidas al respecto. Este es un caso que si bien llevará tiempo, es una derrota casi segura del gobierno, ante lo cual tendrá la posibilidad de rectificar y tomar medidas lo que en caso contrario dejará al Estado de Chile como violador de los derechos humanos en forma permanente.

Ya es hora que el gobierno asuma el problema de la discriminación en forma seria, hasta ahora sólo hay declaraciones de buenas intenciones y financiamiento de fiestas electrónicas o de transformismo a sus partidarios, lo cual es absolutamente insuficiente a las demandas planteadas por los grupos gays, trans y lésbicos. No hay políticas publicas dirigidas al mundo homosexual, así como tampoco hay respuesta en la formulación de una Ley Antidiscriminatoria.

Hasta ahora el gobierno se ha negado a recibir a las organizaciones de la diversidad sexual. MUMS y otros grupos hemos insistido en ser escuchados pero el gobierno mantiene silencio lo cual muestra que el gobierno ciudadano y de puestas abiertas no paso de ser un eslogan de la presidenta Bachelet.

Exigimos que se modifique la actual Ley propuesta en el Senado e introducir medidas reales que garanticen el compromiso del Estado Chileno contra la Discriminación.