El Movimiento Unificado de Minorías SexualesMUMS, está invitando al país a suscribir un «Acuerdo Nacional contra la Homofobia, Lesbofobia y Transfobia«, esto debido a que Chile como país es profundamente homofobico, sin que el Gobierno y otros actores sociales tomen medidas concretas que permitan ir avanzando en los derechos de las personas homosexuales.

Los estudios existentes muestran que la homofobia está muy arraigada en Chile, de hecho, de acuerdo a datos de la Universidad de Chile y Fundación Ideas el país presenta «niveles peligrosos» de intolerancia contra los homosexuales, lo cual configura un escenario favorable a la violencia física y sicológica.

Recientemente se ha publicado un estudio, de CLAM; UCN Y MUMS acerca de las características sociales, experiencias de discriminación, violencia y de movilización política de quienes asisten a la Marcha por el Orgullo LGBT de Santiago. Este estudio realizado sobre la Marcha del año 2007 en Santiago de Chile y, paralelamente, en diversas ciudades de America Latina, revela que Santiago es la ciudad donde hay mas agresiones hacia población LGBTI en la región (84,4%), así como situaciones de discriminación (80,3%). Los hechos que se reportan con mayor frecuencia son discriminación por vecinos (33,1%), en ambientes religiosos (33,1%) y en el lugar de estudios (33,3%). Además se reporta los maltratos por carabineros o la mala atención en comisarías (21,7%) y servicios de salud o por profesionales de ésta área (15,8%), aunque representan porcentajes menores respecto a los otros eventos vividos, no dejan de ser significativos, al demostrar el grado de institucionalización de la discriminación relacionada con la identidad sexual.

Respecto a los hechos de violencia vivida, los resultados del estudio indican que la gran mayoría de la población LGBTI ha sufrido, en algún momento de su vida, algún tipo de violencia (81%). Este dato es muy relevante ya que indica que 8 de cada 10 personas asistentes a la marcha han sufrido algún hecho de violencia en su vida debido a su orientación sexual. Las burlas son el hecho más reportado (70,8%), seguido de insultos o amenazas (57,3%). Los episodios de agresión física se presentan con menor frecuencia (22,8%), aunque por las características de este hecho, las cifras no dejan de ser importantes. Se destaca que la mayoría de las agresiones mencionadas ocurren en lugares públicos, sea en la calle, parques o plazas (47,1%), si bien les siguen el lugar de estudio (21,8%), el hogar (15%) y el lugar de trabajo (4,1%), que juntos suman un 40,9%, con lo cual la distribución de las agresiones entre lugares públicos y espacios más íntimos de relación es bastante pareja (hacer click para ver informe).

El Gobierno oculta la realidad
En el reciente informe sobre la situación de los Derechos Humanos en el país presentado ante la ONU por el Ministro Viera gallo se indica que el país «registra grandes avances» en materia de No Discriminación. Lo cual es falso según el Presidente MUMS, Fernando Muñoz quien indica que los Gobiernos de la concertación han levantado un gran discurso contra la discriminación pero eso no se traduce en políticas reales. Al contrario la inversión en No Discriminación en muy baja, más aun en materia de diversidad sexual.

Chile debe reconocer que en materia de sexualidad, derechos sexuales y diversidad sexual va hacia atrás, se han dejado de lado los planes sobre educación sexual, los planes en contra la discriminación son sólo una alegoría sin presupuesto. Entre otras cosas Chile aun no cuenta con una Ley contra la Discriminación, la misma aun se debate en el Senado y a juicio del movimiento homosexual «es muy deficiente, ya que no contempla educación, promoción o defensa de las personas, ni menos un organismo del Estado con presupuesto e independiente que vele por esto» como ocurre en otros países, en realidad la Ley implica una avance bastante precario para las necesidades reales de la población gay, lésbica, bisexual y transgénero, indica Muñoz.

El lanzamiento de la campaña para la suscripción del acuerdo se realizará este domingo 17 de mayo a las 11:30 en la Plaza de Armas de Santiago, instancia en que se dará inicio a la recolección de firmas.



Acuerdo Nacional para Avanzar en la Eliminación de la Homofobia, Lesbofobia y Transfobia y la Discriminación por Orientación Sexual

Presentación

A 18 años del retorno a la democracia, Chile encara una serie de desafíos mayores para avanzar en la concreción de una sociedad verdaderamente democrática y participativa. La defensa, protección, educación y promoción de los Derechos Humanos es un aspecto fundamental, en donde  destaca la urgente necesidad de avanzar en materia de No Discriminación por Orientación Sexual.

Chile de cara al Bicentenario, requiere dar pasos efectivos, si desea ubicarse en un sitial de excelencia en materia de Derechos Humanos. Con el propósito de avanzar en este sentido, un significativo grupo de organizaciones ha presentado la propuesta  “Agenda de Derechos Humanos para el Bicentenario” que contiene medidas concretas para tal fin. El texto que entregamos a continuación, se enmarca en este contexto y representa un conjunto de propuestas de la población de personas lesbianas, gays, trans y otras identidades de la Diversidad Sexual.

Las Organizaciones y Movimientos por la Diversidad Sexual demandan del Estado posturas claras frente a la No Discriminación y sobre el respeto a los Derechos Humanos por parte de autoridades, personalidades, gremios, asociaciones y otras organizaciones ciudadanas. Esta manifestación concreta de compromisos y voluntades se demanda en mayor grado a quienes postulan para convertirse en autoridades nacionales a través de los procesos eleccionarios diseñados en el país. Es en este marco en el cual se plantea este Acuerdo Nacional que resume de manera sucinta reivindicaciones básicas para hacer de Chile un país comprometido con el respeto de los Derechos Humanos a quienes no son heterosexuales, para en el futuro seguir avanzando en la construcción de derechos no hegemónicamente sexualizados.

A continuación presentamos las medidas para la implementación de este Acuerdo.
Ciudadanía y participaciónSolicitar un pronunciamiento específico de parte de la Presidenta de la República en materia de No Discriminación con el mundo GLBT, además de realizar un gesto de inflexión mediante la realización de una audiencia amplia con representantes de las Organizaciones de la Diversidad Sexual.Hacer de la participación ciudadana un derecho efectivo para los sujetos y para el Movimiento de Gays, Lesbianas, Bisexuales y Trans (GLBT), a modo de que quienes son representantes gubernamentales como Intendentes, Directiva del Congreso y el Ejecutivo, abran espacios de trabajo conjunto, respondiendo así al sentido de pertinencia e inclusión que deben poseer las leyes de nuestro país. Una forma de reconocimiento y validación política de esta indicación, es la incorporación inmediata del trabajo político con población discriminada, por parte del Senado que hoy discute el proyecto de Ley que Establece Medidas Contra la Discriminación.Que se inserte el tema de la No Discriminación como política transversal en las instancias públicas, siguiendo el ejemplo de la implementación del plan de igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres. De este modo, se deberá generar participativamente un Plan de Trabajo por la No Discriminación, que deberá ser implementado por los diversos Ministerios del Gobierno.
Legalidad y derechos

Exigir la pronta aprobación de una Ley Antidiscriminatoria amplia que incorpore legalidad, institucionalidad y presupuesto (de modo similar a las Superintendencias), así como elementos de educación, promoción y defensa de los derechos. La propuesta actual en trámite en el Senado resulta insuficiente, ya que judicializa los casos y que contiene elementos preventivos y promoción de la No Discriminación, por sobre la defensa de las personas. El proceso de judicialización se desarrollará en muchos casos en escenarios dispares, que facilitarán que quienes han sido objeto de discriminación no tengan reparación alguna, así como también que los escenarios de discriminación en los lugares en que estas suceden no se modifiquen. Por lo someramente indicado esta propuesta de ley debe ser mejorada y contemplar en forma más explícita la defensa de las personas.Abolición del artículo 373 que condena la ofensa a moral y las buenas costumbres, el cual es aplicado en forma arbitraria a la población LTGB y eliminar definitivamente el artículo 365, puesto que la modificación realizada es discriminatoria por establecer una edad de consentimiento para relaciones homosexuales distinta del caso heterosexual.Hacer valer los derechos económicos, sociales y culturales, firmados por Chile en los tratados internacionales en la población LTGB y asumir los «Principios sobre la aplicación de la legislación internacional de Derechos Humanos en relación con la Orientación Sexual y la Identidad de Género» propuestos por los organismos internacionales en Yogyakarta y sobre el cual el gobierno de Chile no se ha manifestado con claridad.Elaboración y aprobación inmediata de una Ley de Identidad de Género que responda a las necesidades de hombres y mujeres trans, de tal manera que puedan gozar de todos los derechos que tienen los demás ciudadanos y ciudadanas, partiendo por el derecho a documentos consecuentes con su identidad de género, sin la necesidad de cirugía de reconstrucción genital.Incorporar la extensión de beneficios de salud por parte de prestadores públicos y privados a las parejas del mismo sexo o de parejas de personas trans que están en situación de convivencia.Se requiere la aprobación de medidas legales que reconozcan y amparen el derecho de las familias homoparentales, empezando por reconocer los derechos de las parejas del mismo sexo en plenitud, así como el respeto a la maternidad y paternidad de las personas gays, lesbianas, bisexuales y trans.
Salud

Realización de estudios de las necesidades en salud de la población GLBT: Prevalencia en VIH, ETS en lesbianas, cáncer uterino y otras, impacto de la discriminación en la adquisición del VIH a nivel nacional.Sensibilización al personal profesional y administrativo de salud en materia de Diversidad Sexual, así como la inclusión de la temática de Diversidad Sexual en el currículum de las carreras del área de salud.Incorporación de la salud sexual masculina en la atención primaria y secundaria, a modo de construir un espacio real de atención a gays, bisexuales y otros hombres que tienen sexo con hombres, las especificidades de la población lésbica, las poblaciones trans  y otras expresiones de la diversidad sexual. 

Inclusión en las prestaciones de servicios los tratamientos hormonales para hombres y mujeres que estén en proceso de reasignación sexual, al mismo tiempo de generar espacios de atención y servicios quirúrgicos para las personas que plantean la realización de cualquiera de las cirugías incluidas en dicho proceso.Ampliar  fondos de prevención de VIH destinados a quienes, de acuerdo a los datos epidemiológicos, están mayormente afectadas por él, como son la población homosexual y trans femenina, mejorando los mecanismos de educación y focalización de las acciones preventivas en esta población.

En materia de prevención y tratamiento de drogas es necesario contar con estudios que posibiliten ejecutar acciones dirigidas hacia el mundo GLBT,  programas específicos de prevención de drogas que sean permanentes y que estén focalizados en las necesidades en las características de las personas GLBT.
Educación

Corresponderá al Estado otorgamiento de especial protección al ejercicio de este derecho a todas las personas sin ningún tipo de discriminación. Se requiere del mismo modo, que el Estado retome el rol rector y el control sobre la educación garantizando la existencia, implementación y cumplimiento de políticas contra la discriminación y reglamentos no  discriminatorios en cada centro educativo del país.

Se exige la inclusión de la No Discriminación considerando la Diversidad Sexual en la malla curricular de los estudiantes de pedagogía tanto de pre como postgrado, al igual que exigir cursos en estas materias a otros profesionales que ejercen la pedagogía y/o labores relacionadas. Así como la revisión de los textos escolares en materia de género, identidad y diversidad, asegurando que éstos no contengan elementos discriminatorios o excluyentes de quienes no son heterosexuales.